El memorial de José Engling

José Engling es el primer congregante héroe que ofreció expresamente su vida por el reino de Schoenstatt. Su memorial, junto a casi todos los Santuarios filiales, nos invita a guardar y a apropiarnos de su herencia, y nos recuerda que la vida sólo tiene sentido cuando se hace semilla del Reino de Cristo y de María.

P. Rafael Fernández

Imagen foto_00000003José Engling es el primer congregante héroe que ofreció expresamente su vida por el reino de Schoenstatt. Su memorial, junto a casi todos los Santuarios filiales, nos invita a guardar y a apropiarnos de su herencia, y nos recuerda que la vida sólo tiene sentido cuando se hace semilla del Reino de Cristo y de María.

Historia
En el campo de las cruces negras ocupa un lugar especial el monumento a José Engling, cuyos restos no fueron encontrados. Sabemos de él que cayó muerto como efecto de una granada en Cambrai, en el norte de Francia.
José Engling fue el jefe de la Congregación Mariana de los más jóvenes. Se distinguió por haber sido el primero en captar en forma profunda el sentido de la fundación de Schoenstatt y por su entrega filial y heroica a María y por su unión con el P. Kentenich. Ofreció su vida a la Madre tres veces Admirable por la fecundidad de su Obra. El 4 de octubre de 1918, en plena guerra mundial, Dios aceptó su ofrenda en la batalla de Cambrai.

La gran piedra de este memorial fue colocada por la generación de las Cruces Negras. Tiene una lámpara de cinco vidrios, con los símbolos de los cinco cursos que participaron en la Segunda Guerra Mundial y formaron dicha Generación. Los símbolos que aparecen en los vidrios de la lámpara del Memorial son: escudo y azucena, espada, bandera, fuego del Santo Grial y antorcha. El fuego de esta lámpara es un símbolo que representa a todos quienes ofrecen su vida por Schoenstatt.

La generación del Ver Sacrum sobrepuso en ella, el 31 de Octubre de 1936, una lápida de mármol blanco, que llevaba inscrito Guardamos vuestra herencia, (Wir hütten eurer Erbe), como un llamado a la entrega heroica y generosa por el reino de María. Fueron ellos quienes la colocaron, antes de ser expulsados por los nazis de la casa de estudios (Studienheim), para expresar su compromiso con la herencia de la generación de los congregantes héroes.

El monumento de piedra se cambió por el que existe actualmente. Fue bendecido el 20 de octubre de 1948. Al tratar de despegar el mármol, éste se quebró (o se constató que existía el peligro de quiebre) y se cambió la inscripción por una de fierro forjado, quedando los mismos símbolos y nombres.

En hierro forjado aparece el nombre de José Engling y otros 16 nombres de congregantes caídos en la Primera Guerra Mundial. También colocaron allí el símbolo de la generación: una llama de fuego sobre una patena, que quiere expresar que el amor de la alianza con María lleva la fuerza de la entrega de José Engling y de sus compañeros héroes. La llama tiene tres puntas significando las tres dimensiones de la alianza de amor: con María, con el padre fundador y con el santuario. La patena tiene forma de "V" y la llama de "S", las siglas de Ver Sacrum, (Primavera Sagrada) ideal de la generación.