Evangelio lunes 25 de noviembre

25 de NOVIEMBRE de 2019

Evangelio según San Lucas, capítulo 21, 1 - 4.

Lunes de la Trigésima Cuarta Semana del Tiempo Ordinario

Después, levantando los ojos, Jesús vio a unos ricos que ponían sus ofrendas en el tesoro del Templo. Vio también a una viuda de condición muy humilde, que ponía dos pequeñas monedas de cobre, y dijo: "Les aseguro que esta pobre viuda ha dado más que nadie.
Porque todos los demás dieron como ofrenda algo de lo que les sobraba, pero ella, de su indigencia, dio todo lo que tenía para vivir".

Meditación de Magdalena Fernández Pérez

"Levantando los ojos"

Jesús me dice: tu pasar no me es indiferente. Tampoco tus pequeños esfuerzos por entregarte y hacer el bien. Cada vez que te entregas por tu próximo, yo estoy ahí, observándote con ternura. Y cuando entregas sólo lo que te sobra también estoy ahí, para invitarte a profundizar en tu entrega. No intento recriminar a quienes dieron lo que les sobraba, sino que vengo a ensalzar a esta viuda, que dio también su vida. Cada vez que tengas una decisión difícil que tomar, recuerda que en una esquina de la habitación estoy yo, mirándote con Amor.

Muchas veces me asusta entregar demasiado. Pero Jesús viene a recordarme que no se trata de entregar mucho, sino que de la manera precisa. No es la cantidad de obras, sino que la calidad de éstas. Más valen unos minutos de oración profunda que una hora divagando... una acción realizada por Amor que miles realizadas por los motivos equivocados. Lo importante es saber entregar lo que haga falta, en el momento preciso. Y para esto, una relación profunda con Jesús se vuelve indispensable.

Señor, gracias por levantar tu mirada. Por no ser indiferente a mis pequeños intentos de demostrarte mi amor. Enséñame a entregar todo lo que soy, pero de la manera adecuada. Que nunca me olvide de que en cada acción que realizo tú estás presente, mirándome con dulzura. Que este Amor impregne mi diario vivir, para que mi entrega sea profunda y verdadera. Ayúdame a librarme de todo cinismo, egoísmo y motivaciones distintas a tu Amor infinito.

AMÉN