Evangelio lunes 4 de enero

Lunes 4 de enero de 2021 | Magdalena Fernández

4 de ENERO de 2021

Evangelio según San Juan, capítulo 1, 29 -34

Lunes después de la Epifanía del Señor

Al día siguiente, Juan vio acercarse a Jesús y dijo: "Este es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. A él me refería, cuando dije: Después de mí viene un hombre que me precede, porque existía antes que yo. Yo no lo conocía, pero he venido a bautizar con agua para que él fuera manifestado a Israel". Y Juan dio este testimonio: "He visto al Espíritu descender del cielo en forma de paloma y permanecer sobre él. Yo no lo conocía, pero el que me envió a bautizar con agua me dijo: 'Aquel sobre el que veas descender el Espíritu y permanecer sobre él, ese es el que bautiza en el Espíritu Santo'.
Yo lo he visto y doy testimonio de que él es el Hijo de Dios".

Meditación de Magdalena Fernández Perez

"Aquel sobre el que veas descender el Espíritu"

Jesús me dice: Es muy simple reconocer en dónde estoy, y cuál es mi llamado. Cada día me hago presente en tu vida. En donde veas al Espíritu, ahí estaré. Todo lo que te transmite paz viene del Padre. Este año que comienza, te invito a acercarte aún más a Mí. Quiero que te detengas un momento, y que centres tu atención en el año que acaba de terminar. Piensa en todas esas cosas que te han llenado de Amor, e intenta acogerlas en tu vida. Piensa también en aquellas que te alejaron de Mí, y de qué forma concreta puedes evitarlas este año.

Siempre me ha gustado el Año Nuevo. Pienso que es un bien momento para parar, reflexionar y partir de nuevo. Quiero mirar el año que pasó... un año de crisis, en el que aprendimos como sociedad que no podemos controlarlo todo, y que estuvo marcado por un gran dolor... pero también un año de sueños y proyectos cumplidos, y de aprendizajes muy importantes. Puedo ver con claridad cómo Dios se hizo presente este año, y quiero invitarlo a ser parte de mi vida en el año que comienza.

Señor, gracias por hacerte presente en mi vida. Te pido que te acerques cada día más, y me comprometo a poner los medios para que esto sea frecuente. Quiero retomar la oración diaria y la comunión frecuente -tan frecuente como sea posible. Quiero vivir en tu Amor, y entregarlo a todos los que me rodean. Pero sabes bien que sola no puedo. Te pido que fortalezcas mi espíritu, y aumentes mi fe, esperanza y caridad. Que tu Espíritu Santo descienda sobre mí, para poder dar testimonio de tu Amor con más fuerza.

AMÉN

Comentarios
Nombre:   Procedencia:
Comentario:
Código de seguridad:   captcha
Caracteres restantes: 1000