Evangelio sábado 25 de abril

25 de ABRIL del 2020

Evangelio según San Marcos, capítulo 16, 15 - 20

Fiesta de San Marcos Evangelista

Entonces les dijo: "Vayan por todo el mundo, anuncien la Buena Noticia a toda la creación."
El que crea y se bautice, se salvará. El que no crea, se condenará. Y estos prodigios acompañarán a los que crean: arrojarán a los demonios en mi Nombre y hablarán nuevas lenguas; podrán tomar a las serpientes con sus manos, y si beben un veneno mortal no les hará ningún daño; impondrán las manos sobre los enfermos y los curarán". Después de decirles esto, el Señor Jesús fue llevado al cielo y está sentado a la derecha de Dios.
Ellos fueron a predicar por todas partes, y el Señor los asistía y confirmaba su palabra con los milagros que la acompañaban.

Meditación de Gonzalo Manzano González

El que cree en el Hijo tiene Vida eterna. El que se niega a creer en el Hijo no verá la Vida..."

Dios me dice: quiero que vivas menos terrenal y más mirando al cielo. Envié a mi hijo Jesús a la tierra para revelarles a ustedes mi Palabra y para enseñarles mi amor y mi misericordia. Quiero que vivas con mi Palabra y con el testimonio de mi hijo Jesús en tu corazón; así durante tu paso por la tierra, podrás pensar y actuar más según los deseos de Dios y podrás llegar a nuestra vida trinitaria, no por tus méritos, sino por pura misericordia y el amor infinito que te tenemos.

Necesito la gracia de María, del Espíritu Santo, y la Palabra. Sin ellos creo que me sería muy difícil adoptar una mirada como la de Cristo, ante la gran cantidad de situaciones que la vida terrenal nos pone por delante día a día. Ya sea en el plano matrimonial, con los hijos, con los amigos, en el trabajo, o en cualquier plano de la vida, debo aspirar y esforzarme por tener una mirada según el ejemplo de Jesús en la tierra. Así seguramente mis acciones tendrían más amor; ese amor que Dios quiere de nosotros.

Querido Padre Dios, perdóname por las veces en que no dejo que entres en mi corazón... cuando no estoy atento a pensar o a imaginar que haría Jesús en mi lugar. Padre Santo, quiero mirar a mi prójimo y las circunstancias de la vida como lo hacía Jesús. y así poder actuar con más amor, humildad y justicia. Querida Mater ayúdame a creer, amar y servir y como tú lo hiciste cuando educaste a Jesús. Contigo quiero ahora en silencio adorar al Señor con todo mi corazón.

AMÉN