Evangelio domingo 8 de enero

Domingo 8 de enero de 2023 | Juan Francisco Bravo

8 DE ENERO DEL 2023

Evangelio según San Mateo capítulo 2, 1 - 12

Solemnidad de la Epifanía del Señor

Después de nacer Jesús en Belén de Judea, en tiempos del rey Herodes, he aquí, unos magos del oriente llegaron a Jerusalén, diciendo: ¿Dónde está el Rey de los judíos que ha nacido? Porque vimos su estrella en el oriente y hemos venido a adorarle. Cuando lo oyó el rey Herodes, se turbó, y toda Jerusalén con él. Entonces, reuniendo a todos los principales sacerdotes y escribas del pueblo, indagó de ellos dónde había de nacer el Cristo. Y ellos le dijeron: En Belén de Judea, porque así está escrito por el profeta: y tú, belén, tierra de judá, de ningún modo eres la más pequeña entre los príncipes de judá; porque de ti saldrá un gobernante que pastoreará a mi pueblo israel». Entonces Herodes llamó a los magos en secreto y se cercioró con ellos del tiempo en que había aparecido la estrella. Y enviándolos a Belén, dijo: Id y buscad con diligencia al niño; y cuando le encontréis, avisadme para que yo también vaya y le adore. Y habiendo oído al rey, se fueron; y he aquí, la estrella que habían visto en el oriente iba delante de ellos, hasta que llegó y se detuvo sobre el lugar donde estaba el niño. Cuando vieron la estrella, se regocijaron sobremanera con gran alegría. Y entrando en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose le adoraron; y abriendo sus tesoros le presentaron obsequios de oro, incienso y mirra. Y habiendo sido advertidos por Dios en sueños que no volvieran a Herodes, partieron para su tierra por otro camino.

Meditación de Juan Francisco Bravo Collado

Cuando vieron la estrella, se regocijaron sobremanera con gran alegría. Y entrando en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose le adoraron.

Jesús dice: "Tu trabajo ahora es buscar la estrella. Que la sabiduría que busques sea la que da aquella alegría que encontraron los magos. Busca una sabiduría llena de sentido. Busca una sabiduría que puedas encontrar una casa sencilla. Una sabiduría que puedas descubrir cuando encuentras a un niño con su madre. Ahí, ante esa maravilla cotidiana, es donde te pido que te postres, adores y despliegues tus regalos. Yo te llamo a cultivar la sabiduría de estos sabios. Que esa sea la magia que cultives y que hagas florecer. Te llamo a la vocación de los magos del oriente. Hoy te pido que seas fiel en el seguimiento de tu estrella."

Aquí Jesús hace un llamado a los hombres que hemos formado una familia. Nos llama a ser sabios que siguen una estrella. Libres. No en los altares, sino que en los campos y los desiertos. Una estrella cuyo brillo no se agota en el sagrario, sino que permea hasta mi casa. Me llama a adorar ese amor de la casa, de la madre con sus hijos. A cuidarlo. A sorprenderme de cómo se expande por cada dormitorio, la cocina, el patio... y por todo el mundo donde mis hijos y la mujer que amo se desenvuelven. Ahí está mi 'cancha' de adoración. Me lleno de gozo y me dan ganas de cantar de alegría.

Señor, yo quiero ser un verdadero adorador. Dame un corazón sensible. Dame un corazón de niño. Dame un corazón sencillo, Señor, para entrar en tu presencia. Quiero entregarlo todo. Gracias por poner una estrella tan linda y luminosa en mi camino. Perdón por haber perdido el rastro tantas veces. Gracias por la alegría que me produce ver a mi mujer y a mis hijos amándose. Gracias porque no solo te muestras en el altar sino que, al menos hoy y para mí, te muestras con gran fuerza en los que más amo. Eres muy bueno y cariñoso por eso. Gracias por mi vocación de familia.

AMÉN

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