Evangelio lunes 11 de noviembre

11 de NOVIEMBRE de 2019

Evangelio según San Lucas, capítulo 17, 1 - 6.

Lunes de la Trigésima Segunda Semana del Tiempo Ordinario

San Martín de Tours, Obispo. Memoria obligatoria

Después dijo a sus discípulos: "Es inevitable que haya escándalos, pero ¡ay de aquel que los ocasiona! Más le valdría que le ataran al cuello una piedra de moler y lo precipitaran al mar, antes que escandalizar a uno de estos pequeños. Por lo tanto, ¡tengan cuidado! Si tu hermano peca, repréndelo, y si se arrepiente, perdónalo. Y si peca siete veces al día contra ti, y otras tantas vuelve a ti, diciendo: 'Me arrepiento', perdónalo". Los Apóstoles dijeron al Señor: "Auméntanos la fe". El respondió: "Si ustedes tuvieran fe del tamaño de un grano de mostaza, y dijeran a esa morera que está ahí: 'Arráncate de raíz y plántate en el mar', ella les obedecería.

"Si tu hermano peca, repréndelo"

Meditación de Magdalena Fernández Pérez

Dios Padre me dice: Es muy fácil refugiarse en el pretexto de la "libertad". Cada uno hace lo que quiere, y mientras no moleste al otro, mejor no molestarlo. Pero no puse al lado tuyo a la gente que te rodea por casualidad. Los puse para que juntos puedan caminar hacia la salvación de sus almas. Vive en comunión con tus hermanos. Aprende a aceptar que otros te digan que has cometido un error, poniendo el foco en cómo mejorar. Y ten la valentía de decirle a tu hermano que se ha equivocado.

Me cuesta aceptar estas palabras. Muchas veces evito corregir a otros, por miedo, vergüenza o apatía. Quiero liberarme de estas trabas, y hacer lo que sea mejor para el otro. Hoy el Señor me hace un llamado a crecer juntos, como comunidad. Y quiero responder a éste. Quiero buscar una comunidad con la que compartir mi fe, retomar el contacto con quienes lo he perdido y mantenerme siempre en profunda comunión con Cristo. Que la oración forme parte de mi vivir cotidiano.

Señor. Dame la valentía y sabiduría para saber cómo y cuándo corregir a mis hermanos. Dame también la humildad para saber escuchar cuando me equivoque, y poder reconocer mis errores. Gracias por las personas que has puesto a mi lado. Que nunca me olvide de aprender de ellas, y de entregar lo que esté a mi alcance. Que todo mi actuar provenga de una profunda comunión contigo, para que no sea yo sino el Espíritu quién actúe a través de mim miarda y mis palabras.

AMÉN