Evangelio lunes 17 de enero

17 DE ENERO DEL 2022

Evangelio según San Marcos capítulo 2, 18 – 22

Lunes de la Segunda Semana del Tiempo Ordinario

San Antonio Abad, Memoria obligatoria

Un día en que los discípulos de Juan y los fariseos ayunaban, fueron a decirle a Jesús: "¿Por qué tus discípulos no ayunan, como lo hacen los discípulos de Juan y los discípulos de los fariseos?". Jesús les respondió: "¿Acaso los amigos del esposo pueden ayunar cuando el esposo está con ellos? Es natural que no ayunen, mientras tienen consigo al esposo.
Llegará el momento en que el esposo les será quitado, y entonces ayunarán. Nadie usa un pedazo de género nuevo para remendar un vestido viejo, porque el pedazo añadido tira del vestido viejo y la rotura se hace más grande. Tampoco se pone vino nuevo en odres viejos, porque hará reventar los odres, y ya no servirán más ni el vino ni los odres. ¡A vino nuevo, odres nuevos!".

Meditación de Bernardita Marín Paul

"Es natural que no ayunen, mientras tienen consigo al esposo"

Creo que el Señor me habla y me dice: mi mensaje es de vida nueva y renovada, vine a darte nuevas luces acerca del camino que quiero seguir contigo. Anda al fondo y encuentra mi nuevo y renovado Espíritu que quiere iluminar, no te quedes con la forma, lo superficial, eso no es parte de mi mensaje luminoso. La ritualidad es buena y debe representar el gesto de amor único del Padre, que viene a transformarnos. Reconoce las prioridades y sentido de nuestras costumbres. El ayuno u otros ritos te permiten renunciar a ciertos placeres por amor a Dios, es un acto válido, pero no debe esconder una espiritualidad desordenada.

Me gusta mucho ver como el Señor ordena al ser humano, de una manera simple, pero didáctica. Él se queda siempre con el amor expresado en un momento único, va a lo esencial. La fe en Dios te hace siempre humilde, porque reconoces en otro, que es Dios, el honor, la gloria y el resplandor. Si alguien brilla es porque el amor de Dios se hace presente. Así me gusta vivir pegada al Señor, su amor, disfrutándolo, ya vendrán periodos duros en que lo buscaré, pero hoy está presente y manifestándose y quiero estar con Él.

Señor quiero disfrutar de tu presencia, que nada me haga perder los momentos en que te revelas y puedo reconocerte en un amigo, en un hijo o situación. Quiero también entender los ritos o costumbres que me pueden llevar a un mayor conocimiento de Ti y de la fe. Estos son expresión de Tu sabiduría para el hombre. Solo espero acogerte y verte en esos momentos en que estás mostrando tu grandeza. Mi humanidad es pobre e insuficiente, por lo que te busco, para completar y ser quien quieres que sea. Te quiero mi Señor.

AMÉN