Evangelio martes 10 de enero

Martes 10 de enero de 2023 | Juan Enrique Coeymans

10 DE ENERO DEL 2023

Evangelio según San Marcos capítulo 1, 21 - 28

Martes de la Primera Semana del Tiempo Ordinario

Se hallaba Jesús en Cafarnaúm y el sábado fue a la sinagoga y se puso a enseñar. Los oyentes quedaron asombrados de sus palabras, pues enseñaba como quien tiene autoridad y no como los escribas. Había en la sinagoga un hombre poseído por un espíritu inmundo, que se puso a gritar: «¿Qué quieres tú con nosotros, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a acabar con nosotros? Ya sé quién eres: el Santo de Dios». Jesús le ordenó: «¡Cállate y sal de él!». El espíritu inmundo, sacudiendo al hombre con violencia y dando un alarido, salió de él. Todos quedaron estupefactos y se preguntaban: «¿Qué es esto? ¿Qué nueva doctrina es esta? Este hombre tiene autoridad para mandar hasta a los espíritus inmundos y lo obedecen». Y muy pronto se extendió su fama por toda Galilea.

Meditación de Juan Enrique Coeymans Avaria

¿Has venido a acabar con nosotros?

Pareciera que el Señor Jesús nos dice: en el mundo moderno descreído, contar con que el demonio exista , que nos rodee muchas veces y que nos haga traicionarme, es algo inusual. Mientras más se niegue la existencia del demonio, más poder tendrá tentando y quitando la paz del corazón de mis hijos. No hay que vivir pensando en la actuación del demonio, pero no se puede desconocer ni su existencia ni su acción solapada entre Uds. Yo he venido a salvarlos, y uno de los frutos de la salvación es destruir la influencia del demonio entre los fieles.

Las sutilezas que emplea a el demonio con los,cristianos son numerosas e insidiosas. Para empezar un olvido del pecado, de la traición al Señor. Lo segundo, disminuir su presencia pensando que no nos puede alcanzar. Lo tercero poniéndonos en tentación, y lo cuarto, el olvido del amor de Dios. Se empieza negando el demonio, y se termina negando a Dios. Por eso mi tarea personal, es contar con las tentaciones, pero no vivir concentrado en ellas, y sobre todo, teniendo una vida de oración que disipe su influencia.

Querido Señor, aleja de mí la tentación de creer que el demonio no influye, no nos tienta y no nos engaña. Te pido de todo corazón que quites de mi alma la superficialidad de vivir como si el demonio no tentara y no existiera . Tú viniste Señor a salvarnos de la influencia demoníaca, te pido humildemente, no permitas que caiga en la tentación de creerme inmune a la influencia del demonio, y ayúdame a tener una vida de oración grande y sencilla. Señor, bendito seas ahora y siempre

AMÉN

Comentarios
Nombre:   Procedencia:
Comentario:
Código de seguridad:   captcha
Caracteres restantes: 1000