Evangelio viernes 7 de enero

Viernes 7 de enero de 2022 | Alejandra Castelblanco

7 de ENERO del 2022

Evangelio según San Lucas capítulo 12, 35 – 40

Viernes después de Epifanía

Estad siempre preparados y mantened las lámparas encendidas, y sed semejantes a hombres que esperan a su señor que regresa de las bodas, para abrirle tan pronto como llegue y llame. Dichosos aquellos siervos a quienes el señor, al venir, halle velando; en verdad os digo que se ceñirá para servir, y los sentará a la mesa, y acercándose, les servirá. Y ya sea que venga en la segunda vigilia, o aun en la tercera, y los halla así, dichosos son aquellos siervos. Podéis estar seguros de que si el dueño de la casa hubiera sabido a qué hora iba a venir el ladrón, no hubiera permitido que entrara en su casa. Vosotros también estad preparados, porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no esperéis,

Meditación de Alejandra Castelblanco de Prieto

"Estad siempre preparados"

Jesús parece decir: la preparación a los que hoy los invito, es a tener un tiempo del día destinado al cultivo del mundo interior, a conversar con mi Padre, igual como lo hacen con su padre terrenal, a revisar lo que estuvo bien y lo que faltó para que algo que no fue tan bueno, estuviera bien. En resumen, si cada día se preguntan: ¿En quién o en qué vi el rostro de Dios? Solo esa pregunta, los conectará con su interior y por lo tanto con el Espíritu Santo que vive en cada uno de sus corazones.

Hoy me invitaron a un paseo que se hará en diez días más. No pude dar una confirmación definitiva de ir. Tengo mi bolso preparado por si me invitan a la playa. Contesté. Ese motivo, es importante para mí, me ilusiona poder salir, descansar, después de un año tan desafiante. Sin embargo, esta preparación que hoy me invita Jesús, siempre puede esperar, siempre hay plazo, y en eso se me van los días. Siempre pienso que lo más difícil en el cultivo de la fe, es el día a día, ya que, requiere constancia y perseverancia. Quiero proponerme hacerme esa pregunta, partir por eso y así darle una preparación especial al 2022, que recién comienza.

Querido Señor: No te cansas de invitarme. Una y otra vez, lo haces, con sutileza, con cariño, con sabiduría, partiendo por poco para ir alcanzando lo mucho. El cambio de año lo veo como una gran oportunidad para volver a revitalizar la fe, y este camino que me propones es muy lindo porque me "obliga" a mirarte todos los días, en una persona, en un gesto, en la naturaleza, en los más cercanos y en los no tanto. Todos tienen algo que mostrar de Ti, todos somos tus hijos, ayúdame a descubrir día a día tu rostro y así voy preparándome para lo más grande.

AMÉN

Comentarios
Nombre:   Procedencia:
Comentario:
Código de seguridad:   captcha
Caracteres restantes: 1000