La obra de Schoenstatt es tanto del Padre como de sus hijos e hijas espirituales

El Arzobispo de Santiago, Monseñor Francisco Javier Errázuriz, ofició la misa por los 100 años de sacerdocio del Padre Kentenich en el Santuario de Bellavista, el templo matriz de Schoenstatt en la capital chilena. Entrevistado por Schoenstatt Vivo, habló del carisma que el fundador dejó como legado, de su figura paterna y de la manera como su ejemplo, cariño y cercanía lo influyeron en lo personal. Destacó, también, la importancia de sus seguidores -hijos e hijas espirituales- en el génesis y desarrollo del Movimiento de renovación que es Schoenstatt, concebido para y por la Iglesia.

| Monseñor Francisco Javier Errázuriz Monseñor Francisco Javier Errázuriz