Monte Schoenstatt

Nuestra Rama de familias es también una familia. Así lo hemos entendido en nuestro caminar como Rama orientados por la espiritualidad y pedagogía del P. Kentenich. Por eso, también como Rama hemos sentido la necesidad de tener nuestra casa que nos reúna a todos. Un hogar para el encuentro fraterno, para compartir y trasmitir la vida que el Señor va despertando en nosotros, de reflexión, de oración comunitaria, de creación para proyectos de servicio a la Familia de Schoenstatt y a la comunidad.

Este anhelo de tanto tiempo comienza a hacerse realidad con la adquisición del terreno de 4 Hás: Monte Schoenstatt. Allí queremos construir nuestro centro de acogida, nuestra casa, para todas las familias que participan en la Rama en esta zona (Lo Barnechea, Vitacura, Las Condes), El lugar donde nuestras familias: padres, hijos, nietos, puedan experimentar la alegría del encuentro enfamilia, del jugar; celebrar; orar; aprender; de forjar en pequeño, la misión de Schoenstatt para la sociedad; una comunidad nueva, de fe y amor, de sólidos vínculos personales.

El desafío está allí: ¡a las puertas! Pero, nuestra casa queremos construirla en familia, como corresponde a nuestro sello propio, no por unos pocos..Con el aporte de cada uno de acuerdo a sus posibilidades, conversado en familia y con el Señor y la Mater -que no se fijan en la apariencia sino que ven en el corazón de cada uno-, con generosidad, pensando no sólo en estos momentos, sólo en nosotros, sino en la fecundidad que brotará de esta casa para la generaciones futuras, que muy probablemente necesitarán afirmar más aún el valor de la familia para construir una sociedad más humana y cristiana. 

Los saludan con alegría y esperanza,